Rescátame de este infierno en el que estoy metida. No puedo parar de pensar en tí, soñar contigo, imaginarte en mi vida como la única pieza que falta en el rompecabezas.... ¡Sál! Por favor, no te conviertas en mi nueva droga porque no puedo volver a pasarlo mal. Tengo miedo a que fracasemos en un vano intento de probar lo imposible. Tengo miedo a que acabemos siendo dos extraños. Porque cuando pienso en tí, seamos sinceros, te imagino mucho más cariñoso, más alto, más guapo, más inteligente y más sensible... Y cada día me encuentro con la decepción de que sigues siendo el mismo de siempre y no el de mis sueños.
No es bueno idealizar a las personas, es mejor aceptarlo por como es y si te gusta asi arriesgarte! Si la pasaste mal alguna vez con el, no creo que valga la pena. Gracias linda por tu comentario, me gusta tu blog (:
ResponderEliminar